La frontera norte de México vota con la esperanza de una solución migratoria

Los electores de la frontera norte de México acudieron este domingo a votar con la expectativa de que la próxima presidenta sea una mujer y que ponga remedio a la crisis humanitaria derivada de la migración récord en la zona.

Los electores también lamentaron el retraso, porque hasta las 12:00 horas (18:00 GMT), cuatro horas después del inicio de la jornada, sólo el 72% de los centros de recepción de votos estaban instalados, según informes oficiales.

Alejandra Zabre, quien llegó temprano, indicó que es muy importante que en esta elección “es prácticamente un hecho” que una mujer seguirá al frente del Ejecutivo federal, ya que las dos principales candidatas son la oficialista Claudia Sheinbaum y la opositora Xóchitl Gálvez.

“Estamos haciendo historia, es una votación donde finalmente vamos a elegir una presidenta. Aunque toda la organización está un poco caótica, creo que deberíamos salir a votar”, afirmó el ciudadano.

“Teniendo una mujer en el poder, veremos las propuestas para la protección de las mujeres. “Es algo que cambia el paradigma de las mujeres, que poco a poco estamos rompiendo ese techo de cristal”, añadió.

Pero en Juárez, epicentro de la tensión entre México y Estados Unidos por la migración, también es relevante el flujo migratorio sin precedentes en México, donde la migración irregular detectada por el Gobierno creció un 200% anual en el primer trimestre hasta las 360.000 personas.

María Eloísa Hernández Rosales indicó que esto necesita una solución urgente.

«Estamos hablando de economía y la economía mueve al país, hay que tomar las bases humanitarias», dijo, antes de agregar que los migrantes «como todo ser humano, tienen derecho a buscar una vida mejor, pero mientras el orden y regulaciones.

En los últimos tres años, Juárez, en la frontera con El Paso (Texas, EE.UU.), ha recibido cientos de miles de migrantes que luego cruzan la frontera para buscar trabajo en Estados Unidos.

“Se aplaude a la gente que viene a buscar un futuro mejor, pero siempre y cuando lo haga obedeciendo los reglamentos y leyes del lugar al que va”, dijo Hernández Rosales mientras esperaba en la fila para votar.

Luis Armando Peña, un elector con doble ciudadanía que puede votar en las elecciones presidenciales de México y Estados Unidos este año, acudió a pesar de no poder caminar sin la ayuda de un andador.

“Tengo doble nacionalidad, mexicana y estadounidense, definitivamente va a haber un cambio, está pasando lo que antes no pasaba, ahora viene gente de muy lejos, de otros países”, agregó. efe